Cuatro meses he aguantado sin comentar nada en ningún sitio y hoy he picado dos veces.
Ando muy escaso de certezas, pero una que tengo y que se fortalece conforme pasan los años - los minutos - es la inutilidad de dar mi opinión o de intentar rebatir las opiniones ajenas. Quizá desde los 0 hasta los... ¿12? años de edad se pueda hacer algo, luego somos inamovibles. Que no, oye, que hablando no se entiende la gente, que cada uno cargamos con nuestro sistema operativo y sanseacabó.
He picado en Youtube con el vídeo de Tony Cantó (http://www.youtube.com/watch?v=98RVP3Nxkfk) y he picado en Facebook "contra" unos amigos míos con los que normalmente coincido bastante.
No, está vez no hemos coincidido, que han estado de un "correcto" que me han echado patrás.
Estaban todos entusiasmados firmando ¡contra un libro! y por su retirada de El Corte Inglés y de otros lugares. Claro, es que el tema era muy poco estético en los tiempos que corren, pero ¡caramba! no aguanto tantas diferentes barras de medir para todo y tanto gilibuenismo y tanta hipocresía (de todo eso también había en los comentarios donde Tony Cantó y por eso he picado). Bueno, que el libro no proponía matar a nadie - ni siquiera en su forma fetal - ni hacía apología del terrorismo - ni siquiera de ETA - ni elogiaba un régimen liberticida - ni siquiera uno comunista. Es que el libro se titula "Cómo prevenir la homosexualidad" y de subtítulo "Los hijos y la confusión de género"...
¡¡¡¿Cómo osan?!!!, ¿cómo no están ya en la cárcel sus autores/editores etc.?. Y tal.
Libertad sí, pero ojo ¿eh?, no te confundas.
Qué depre tío...
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